Centro Deportivo Spa Cerro Apoquindo

Fuimos a conocer las condiciones de accesibilidad universal del Centro Deportivo Spa Cerro Apoquindo, una infraestructura municipal ubicada en la comuna de Las Condes.
La actividad deportiva en piscinas aporta tremendos beneficios para la salud, especialmente para personas con discapacidad y adultos mayores. De ahí nuestro interés en analizar sus instalaciones y como satisfacen las necesidades a estos grupos en particular.

Este centro deportivo está construido en una ladera de cerro, presentando varios desafíos en términos de accesibilidad. Su proyecto consideró desde el inicio soluciones de diseño y accesibilidad universal logrando incluir a personas de diferentes edades y habilidades.
Es así como este lugar recibe a sus vecinos y visitantes con todas las medidas de infraestructura necesarias para un desplazamiento autónomo e independiente: Estacionamientos, rampas de acceso y conexiones interiores hacia el gimnasio y otras salas de actividades como también dispositivos para ingreso a piscina y spa entre los más importantes.

Foto izq.: Los estacionamientos se comunican por medio de rampas hacia el acceso principal del centro deportivo. Foto der.: una rampa conecta el acceso peatonal desde la vereda con la entrada a la edificación.

Fotos der. e izq.: ambas piscinas cuentan con dispositivos de ingreso al agua

Foto izq.: ducha a nivel para ingreso de persona en silla de ruedas o con ayudas técnicas. Foto der.: cubículo accesible con inodoro y barras.

Lo que faltó: un recinto con camilla que permite cambio de ropa y otros procedimientos

Lamentablemente muchos recintos similares a este suelen omitir un espacio para responder a visitantes y deportistas usuarios de silla de rueda que no pueden permanecer de pie para realizar el secado y cambio de ropa, pero si están capacitados para competir, nadar y disfrutar de un baño.

 Estos lugares, que implican necesariamente el cambio de ropa, requieren de un área privada con una camilla que permita efectuar el cambio de ropa en forma acostada (con o sin asistencia).

 La camilla debe tener altura regulable, de preferencia de ajuste automático o en caso contrario una altura fija entre 0,48 a 0,5 m para que sirva a la transferencia desde una silla de ruedas o facilite la asistencia durante la transferencia. Debe estar firmemente sujeta al piso o su peso resistir la transferencia sin riesgo de volcar.

 El recinto donde va la camilla debe estar próximo o en el mismo recinto de la ducha accesible. En caso de adaptaciones se prefiere habilitarlo lo más cerca posible a la ducha accesible, considerando que después de la ducha el cambio de ropa se hace sobre la camilla. Además, debe proporcionarse una silla de rueda de ducha, con ruedas y aros de autopropulsión.

 Si bien la mayoría los deportistas y visitantes (con o sin discapacidad) pueden hacer uso común de los camarines por sus condiciones universales, sin una camilla con las condiciones señaladas, resulta imposible el cambio de ropa para un número también importante de usuarios que buscan y necesitan de este tipo de deporte.

 El diseño de camarines generales debe apuntar a que el máximo de sus elementos considere medidas y características universales (duchas a nivel, lavamanos, griferías, etc.). Así, cada visitante y deportista con o sin discapacidad podrá utilizar la infraestructura que mejor se ajuste a sus necesidades particulares, sirviendo de mejor manera en caso de que más de una persona o un equipo completo de deportistas con discapacidad requiera usar las instalaciones. Ver Baños Accesibles.

¿Qué normas de accesibilidad se obligan en recintos deportivos?

 Camarines con vestidores, servicios higiénicos y duchas para ambos sexos, además de servicios higiénicos y duchas para personas con discapacidad.

 Las puertas de acceso a los camarines deben medir 1,2 m de ancho para permitir el paso de sillas de ruedas de competición que tienen una medida de ancho superior a una silla estándar.

 En su interior, el espacio destinado a la circulación debe permitir el giro en 360º de una silla de ruedas, requiriendo para ello de una superficie libre de un diámetro de 1,5 m, separada del espacio de las duchas y de los asientos de los vestidores.

 La puerta de acceso al cubículo accesible en el interior del camarín requiere también un ancho de 1,2 m.

 En duchas se aplica un diseño universal, sin desniveles para acceder, asegurando un buen desagüe con adecuado escurrimiento de aguas, grifería de tipo palanca instalada a una altura máxima de 1,1 m y ducha tipo teléfono con sujeción estándar y una alternativa alcanzable a máximo 1,2 m. Con ello se logra un cómodo uso de pie y también desde la posición sentado.

 Los pisos deben ser antideslizantes en seco y mojado. *En especial los de recinto de piscina y spa.

 Lockers con mecanismos de apertura de casilleros y colgadores que no superen los 1,2 m de altura.

Izq.: camarín general con máximo de condiciones de diseño universal suma un recinto privado con camilla para cambio de ropa y procedimientos más personales. Der: recinto mínimo de servicio higiénico que incorpora una camilla, necesario en lugares de alta permanencia de tiempo, necesidad de muda, cambio de ropa y para procedimientos que requieren acostarse sobre una camilla.

 Algunas sencillas buenas prácticas adicionales a la norma evitan resultados que limitan a algunos a poder realizar las mismas actividades que el resto. El diseño lo hace posible, sin aumentar los costos se pueden lograr espacios funcionales y que generen más clientes y satisfacción por los servicios.
Un llamado a los administradores de este centro deportivo sobre la necesidad de la existencia de un recinto con camilla para personas con discapacidad que lo necesitan.

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